aguadas

El dibujo con tinta china no se limita solo a la plumilla. En ocasiones, sobre todo cuando el asunto corre prisa, se puede recurrir a la aguada. Esto me debió pasar en la visita Perugia, hace algunos años, en una de las excursiones de semana que hacíamos desde la clase de italiano, en la Escuela de Idiomas. Es buen sistema ese de no ir a hacer una gira, sino quedarse unos días en cualquiera de las hermosas ciudades de Italia. El viaje a Perugia fue uno de los que mejor recuerdo me dejaron, a juzgar por el número de trabajos que rondan por el estudio en la colección Magdalena Juan.







1 comentario:

Anónimo dijo...

Muy bellas "aguadas" esta vez la sal la pusiste tú...un saludo